Tercera parte:
El YOPO es una planta con una
historia etnobotánica muy rica. La etnobotánica estudia las relaciones entre
los grupos humanos y su entorno vegetal, es decir el uso y aprovechamiento de
las plantas en los diferentes espacios culturales y en el tiempo. La raíz de
este término proviene del vocablo (etnos) que quiere decir pueblo o raza; esta
disciplina estudia la interrelación de los grupos humanos con el medio ambiente
y en especial el uso que hacen de estos vegetales para protegerse:
Vivienda, vestuario; para alimentarse;
para sanarse; para comunicarse: papel, tinta, tejido, tatuajes, para
sus relaciones sociales: juegos, rituales, fiestas, música y en su cosmovisión Mágico-Espiritual.
La historia de la etnobotánica se
remonta a los años 77 después de Cristo cuando el médico cirujano Dioscórides
publico “De materia médica” Un catalogo de 600 plantas del mediterráneo en el
cual explicaba como lo usaba los griegos; en especial propósitos medicinales.
El YOPO está relacionado con por lo
menos 55 tribus de Suramérica y el Caribe a saber: Brasil, Colombia, Ecuador,
Chile, Perú, Haití, Republica Dominicana, Puerto Rico entre otros; pero es en
Venezuela donde se logro mantener y conservar la cultura ancestral alcanzando
mayor arraigo y especialización en el
uso de esta planta sagrada de poder en varias etnias en especial en los
yanomamis y los Piaroas.
La esnifada que se prepara con la
semilla de la planta también es conocida con el nombre de cohoba o vilca. La
manera de usar o aplicar el YOPO va desde tomarlo oralmente en incluso
rectalmente, pero la forma más común es parentalmente, es decir inalado, o
soplado por la nariz.
El componente activo del YOPO es la
Bufotenina o 5-Hidroxi-dimetiltriptamina la cual es 5 veces más fuerte que el
D.M.T. La bufotenina (5-hidroxi-DMT) no es toxica ni aditiva posee más bien
propiedades catártica que genera procesos de desesquematización y
reordenamiento. La bufotenina se encuentra en la sangre y en la orina de
humanos normales esto se sabe desde los estudios de Franzen y Gross en 1965
después fue confirmado por Karkkaines y Raisanes en 1992 la bufotenina
(5-Hidroxi-DMT) no está prohibida en la lista de drogas mundial convenio de
Viena y siguientes mientras que la dimetiltriptamina (DMT) si lo está.
La bufotenina es un potente psicoactivo
una molécula que lleva mensajes a las células nerviosas del cerebro. Se
encuentra en las plantas Anadenanthera peregrina mejor conocida como YOPO, en
la piel de algunos sapos del género bufo y en algunos hongos.
En la edad media específicamente en
el año 1657 fue la causa de un juicio de la santa inquisición a 5 supuesta
brujas que fueron quemadas; en el expediente decía que las 5 brujas tenían un
sapo al que azotaban y cogían lo que brotaba de su piel y se lo untaban
logrando con ellos transfigurándose e ir a donde quisiera. Ya en el año 1451
Alfonzo De torado obispo de Ávila
declaraba que los vuelos y transformaciones de las brujas no eran sobrenaturales
ni demoniacos si no efectos y poderes dados por sus brebajes. Para la cultura
indígena o nativa de la cuenta Orinoco el mundo material y el espiritual no
están disociados, si no que forman una totalidad. Para su sabiduría y
cosmovisión las enfermedades físicas, emocionales, energética, mentales y del
alma son causadas por seres elementales, duendes, demonios y demiurgos los
cuales pueden enfermar al individuo como consecuencia de haber infringido
algunos principios y reglas que rigen el buen vivir. Para poder restituir la salud
es necesario comunicarse con los primeros creadores, manu y guardianes de la
raza, para ellos el Taita o Shaman inhala el YOPO con el fin de llegar a
estadios superiores en el cual podrán determinar la causa del desequilibrio o
enfermedad en ese plano. El shaman puede acceder a los códigos que devolverán el
equilibrio o salud deseada; es importante resaltar que estos especialistas en
el arte shamanico también pueden ocasionar los desequilibrios y enfermedades o
preverlas si así lo prefieren.
Ensayo escrito por el Chamán Iwishin Nelson Perozo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario